¡Nuestro amor por Dios no se limita a un día de la semana, sino que lo expresamos públicamente los domingos como una familia de creyentes! Apartamos el domingo para enfatizar nuestro amor por Dios a través de la adoración y la unidad. En los servicios de fin de semana, nosotros:

Dios es omnipresente, por lo tanto, Él está en todas partes viéndolo todo, aún donde hay pecado; pero su bendición solo está donde su pueblo le alaba. Salmos 22:3 dice que “Dios habita entre las alabanzas de su pueblo”.

Porque cuando nos reunimos y nos conectamos espiritualmente, como dice Mateo 18:20 atraemos la presencia de Dios, “Donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. Y entonces…

Cada vez que nos unimos en armonía para adorar a Dios, bendición llega a nuestras vidas. “¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía! …Porque allí envía Jehová bendición, y vida eterna”. Salmos 133:1-3

“La fe viene por el oír, el oír por la palabra de Dios”. (Romanos 10:17). Y la Palabra de Dios es el alimento del alma. “No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios”. Lucas 4:4

Es importante orar en privado, pero hay algo especial cuando oramos juntos. Todos llegamos a la casa de Dios con diferentes necesidades, pero algo sucede cuando nos unimos en oración. “Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos”. Mateo 18:19